¡Volvimos a Belisario Club de Cultura!
Hace unos pocos días estuvimos espectando “Sueño Raffaela” y en esta oportunidad fuimos invitados para ver la creación colectiva del estudio de Marcelo Savignone, “Yo amo”.
Hablar de Savignone es entender que la propuesta física (tanto como el debate filosófico) estará presente.
En esta ocasión el elegido es Federico García Lorca, más precisamente “La casa de Bernarda Alba” como excusa argumental para hilar, tejer y destejer un derrotero de procedimientos inarticulados que intenta reflejar de alguna manera los procesos mentales del recuerdo. Un laboratorio de búsqueda de imágenes explosivas que remiten al funcionamiento de los sueños, el bucear en la memoria ó un anecdotario de uno de los personajes presentes (o de todos, o de cada uno).
Con gran cantidad de referencias a la realidad de los docentes de teatro, la supervivencia económica de los espacios culturales, los estudiantes de teatro, los devenires de las clases y ensayos, la obra está plagada de chistes para el público teatrero, pero sin dejar por fuera completamente al espectador más “virgen”.
Las intertextualidades están la hora del día, no sólo por “La casa de Bernarda…”, sino también por “A las 5 de la tarde”, así como otros textos de índole literaria y del campo de la filosofía. Marcelo Savignone conduce a los intérpretes de su estudio a acompañarlo en su búsqueda personal de estos años de su carrera.
Lo conseguido es un espectáculo de precisión relojera. Cuerpos y voces técnicamente correctos en un despliegue coreográfico y sincrónico muy atractivo.
El vestuario es neutro, pero al estar presente la referencia de la obra lorquiana de esa madre y sus cinco cadenas, inevitablemente asociamos el negro al luto de esa familia y esas paredes que se juntan unas con otras de la vergüenza.
El diseño de luces es impecable, el trabajo de Raíces y Savignone en la iluminación es admirable. Transforman al espacio vacío y profundo de Belisario de distintas formas con la utilización de planos de profundidad lumínica, contraluces, frontales y rasantes. Un aparente minimalismo que esconde un gran conocimiento en el área.
Lo sonoro específico también es construido por los intérpretes, que no sólo proponen en algunos momentos una rítmica particular con sus cuerpos, sino que este signo también está presente en los silencios, los “no-silencios” y las distintas velocidades en parlamentos, desplazamientos, secuencias físicas y cambios de sentido. La biomecánica aquí se puede observar como lineamiento explícito, donde cumple un papel estelar. Es muy notorio el entrenamiento de los intérpretes de este estudio.
“La realidad puja por salir” dice la sinopsis de esta obra. No podría decirse mejor. Si bien el procedimiento es extraño (en el sentido brechtiano), justamente esa poética es la que permite la lectura crítica de lo que se observa. La identificación pasa a segundo plano muy rápido, entonces el discurso que plantea el espectáculo nos atraviesa y hace reflexionar.
Felicitaciones por hacer de un espacio vacío, una obra.
Para finalizar, festejo al teatro y agradezco la invitación que me brindó esta compañía para compartir algunas palabras desde mi completa subjetividad y experiencia en esta función de sábado 20 de abril de 2024.
Gustavo Insaurralde
Director Teatral – EMAD
Actor – Diseñador de Iluminación – Productor – Gestor Cultural
Co-Fundador «Experimento Escenario Teatro»
Ficha Técnica «Yo amo»
Concepción: Marcelo Savignone
Actúan: Leandro Arancio, Jesica Boladeras, Paula Botana, Aurea Cruz, Pilar Juaristi, Mariana Judez, Adriana Menendez, Flor Otero, Maria Jimena Puente, Lucia Revello, Daniel Rocchia
Iluminación: Fernando Raíces
Diseño de luces: Fernando Raíces, Marcelo Savignone
Fotografía: Cristian Holzmann
Diseño gráfico: Edgardo Carosia
Asesoramiento de vestuario: Mercedes Colombo
Asistencia de dirección: Tatiana Sarbia
Colaboración artística: Tatiana Sarbia
Dirección: Marcelo Savignone
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